10 poderosas herramientas para tener éxito

22.02.2021 18:29

“El éxito es el estado o la condición de cumplir con un rango definido de expectativas. Puede verse como lo opuesto al fracaso”. Eso dice Wikipedia pero, la verdad, no concuerdo con esto.

Éxito es una palabra que escuchamos a menudo, desde pequeños nos inculcan que debemos ser exitosos y siempre se asocia a tener o acumular (títulos, dinero, bienes materiales, reconocimiento…), más que a ser. El éxito también se asocia con la aceptación-aprobación. Sin embargo, poco tiene que ver con esto. Tener muchos seguidores en las redes sociales tampoco te convierte en exitoso; conozco a algunos "influencers" cuya vida es un desastre.

Creer que el éxito está asociado a algo externo provoca que, al no conseguir eso tan deseado - "el trabajo de tus sueños”, “la pareja ideal”, “el auto del millón”, “el título académico”, “la familia feliz”, “el cuerpo perfecto”, “la mejor casa”, “el último iPhone”, etc.- nos sintamos fracasados, decepcionados y hasta devaluados. Te aseguro que esta idea es errónea. No te pido que me creas, sólo piensa en toda la gente que vive deprimida o que decide quitarse la vida a pesar de tener en su cuenta muchos millones de dólares, fama, bienes materiales y todo lo que, en teoría, sería suficiente para ser inmensamente feliz.

¿Dónde es la falla?, pues en el concepto que tenemos de lo que significan el éxito y la felicidad. Y es que ambos están relacionados con algo que viene del INTERIOR, no del EXTERIOR. Por eso, aunque acumulemos muchas cosas de todo tipo, incluso una suma importante de dinero, igual podemos sentirnos miserables.

El éxito en realidad está ligado con todo aquello que no podemos ver, tocar, ni oler, pero que ¡existe! Está más relacionado con la paz, la luz que emanamos y la seguridad con la que nos conducimos. Igual tiene que ver con nuestra calidad como seres humanos y con lo que aportamos al mundo, con nuestro legado, por lo tanto, el enfoque debe estar en construir todo eso. ¿Cómo se hace? No es que haya una receta o una fórmula, lo siento. Sin embargo, sí hay acciones concretas para sentir que nuestra vida tiene valor, para sentirnos poderosos y sentir que nuestra estancia en este mundo, en este momento, tiene sentido.

1. Tener un objetivo de vida claro y sincero. ¿Te has preguntado qué quieres hacer, qué te gusta realmente? No lo que te inculcaron de pequeño sino lo que realmente te emociona, eso que harías sin poner por delante una recompensa monetaria.

2. Vivir en el presente. Se llama así porque es eso: un regalo. ¿Y por qué es un regalo? Porque manteniéndonos en este tiempo podemos sentirnos verdaderamente felices; es decir, quizá digas: “hoy perdí mi empleo”, “hoy murió un ser amado”, “hoy me divorcié”… de acuerdo, puede ser que hoy no sea el mejor de tus días, sin embargo, es importante considerar que así como la vida trae momentos maravillosos también tiene adversidades y todo hay que APRENDER a aceptarlo. Vivir en el pasado causa depresión, vivir en el futuro produce angustia. Es hoy cuando se experimentan los sentimientos reales y no esos que la mayoría de las veces sólo existen en nuestra cabeza. Hay una frase contenida en el libro "El camino a la abundancia", de Deepak Chopra ꟷmédico, escritor y conferencista indio, quien también practica la espiritualidadꟷ, que dice: “Si tu atención está fragmentada tú también lo estás; cuando tu atención está en el pasado, tú estás en el pasado; cuando tu atención está en el presente te encuentras en presencia de Dios y Dios está presente en ti”. Esta frase tiene un gran significado y encierra mucha sabiduría. Más allá de tener un enfoque religioso, tiene que ver con la espiritualidad.

3. Fijar tu atención en lo positivo. Si bien es cierto que la vida nos trae cosas maravillosas y experiencias complejas, también lo es que donde se fija la atención, eso sucede. Por ejemplo, alguien está pensando en comprarse un auto nuevo de un determinado color; de pronto, empieza a ver por todos lados muchos autos de ese modelo y de ese color, eso es porque su atención está centrada en lo que está deseando con todas sus fuerzas. ¿En dónde está tu atención ahora mismo? ¡La magia existe, aunque te resistas a créelo!

4. Ser consciente. Los seres humanos vamos por la vida en “piloto automático” y nunca, o casi nunca, somos conscientes, sólo hacemos las cosas casi por inercia. ¿Cuántas veces agradeces por la mañana por tener otro día más de vida, sabes que millones de gente en el mundo ya no tuvieron ese regalo? Cuando te duchas, ¿cuántas veces sientes y disfrutas el agua calientita sobre tu cuerpo? Al comer, ¿reconoces cada sabor, aroma, textura o temperatura de tus alimentos? Cuando vas caminando por la calle, ¿cuántas veces te detienes a observar lo que hay a tu alrededor? Y así con muchas cosas más, ¿cuántas veces eres consciente de lo afortunado que eres, de las bellezas que te rodean? Si no despiertas tu consciencia jamás lo verás y no podrás sentirte afortunado por ello.

5. Cambiar el concepto de felicidad. Aunque puede haber muchas definiciones (cada quien puede armar, incluso, la suya), una que me gusta mucho es la que comparte la médico psiquiatra Marián Rojas Estapé, quien asegura que “la felicidad no tiene que ver con lo que nos sucede sino con la manera en la que lo interpretamos”. ¿Cómo estás interpretando tu vida, cuál es la historia que te estás contando, cuál es la película que estás proyectando en tu mente ahora mismo?

6. Agradecer. ¿Lo haces cuando despiertas? ¿Sabes cuántos millones de personas no corrieron con la misma suerte que tú o tus seres amados? Alimentos, ropa, amigos (humanos y peludos),  experiencias, todo es un obsequio maravilloso.

7. No depender de la motivación externa. Este es todo un apartado pero, ¿no te parece muy complicado y agotador supeditar tu estado de ánimo y tus emociones a lo que digan o hagan otras personas? Piensa en toda la energía que ahorrarías si no te enojaras, si no sufrieras, ¿a qué la dedicarías, a construir una empresa, a generar un nuevo negocio? Ceder tu poder a otros para que manejen lo que sientes, no suena agradable, ¿verdad? Entonces, ¿por qué lo haces todo el tiempo?

8. Enfocarte sólo en ti. Por más que intentemos, nunca lograremos cambiar los pensamientos o acciones de los demás, a menos que ese alguien desee, por voluntad propia, transformar algo. Deja de ocuparte de ellos y ocúpate únicamente de ti, de tu interior. Piensa que tus acciones pueden inspirar a alguien más, incluso a un colectivo, eso es mucho más sencillo que enredarse tratando de entrar en la mente de otros, ¿no te parece?

9. Disfrutar los momentos simples de la vida: caminar, sonreír, abrazar (ya falta menos para hacerlo), cantar, bailar, correr, comer un chocolate, beber un té…

10. Pensar en tu muerte. No para asustarte o deprimirte sino para ser consciente de tu finitud. ¿Seguirías actuando de la misma manera si supieras que te quedan unas semanas de vida? Si tu respuesta es negativa entonces cambia hoy y saborea hoy las mieles del éxito.

Como ves, casi todo lo que he mencionado proviene del mundo interno y es ahí donde se construye, no en el exterior. Si piensas, pero sobre todo si practicas todos y cada uno de los días de tu vida, te aseguro que no sólo te sentirás sino que serás una persona exitosa al ejercer todos tus superpoderes, esos que fuiste perdiendo al absorver creencias erróneas, al intentar satisfacer falsas expectativas, al complacer a los otros, al buscar en el lugar incorrecto, al enfocarte en el TENER más que en el SER. Para ser exitosos hay que vivir en el mundo real, más que en el virtual; hay que vivir en el presente, en el ahora mismo. Mantenerte anclado a este momento te libera del sufrimiento y de todo lo negativo. ¿Qué esperas para vivir de manera exitosa?